-Te recordás de aquél shumo que nos vendía los hongos, se mató el hijo de puta. Dicen que lo encontraron esposado de las manos con una bolsa plástica en la cabeza.
-Puta madre no te lo puedo creer, sí aquél era bien relajado y tranquilo. Eso si le fascinaba el libe al maldito ¿será que debía pisto o que putas?
-Qué putas, sí aquel desde que se le murió su viejo se quedó con la finiquita, y esa mierda si da pisto. Ni hipotecada la tenía y como a 8 muchachos les daba trabajo allí, el clavo fue otro, te recordás del nombre de su chava.
-Creo que Raquel o Rossana era el nombre de aquella. ¿Y cuál fue el pedo pues?
-Pues si te has dado cuenta ella ya no esta acá, desde hace como tres meses se fue a la verga. Dicen que fue con uno de esos que tumban camiones, un mejicano más cerote que vos y yo juntos. Un verdadero hijo de la gran puta.
-No te creo sí aquella todo lo que quería lo tenía con aquel, hasta camioneta le compro el imbécil. Como se llamaba este hijo de puta... ¿Mauricio va así se llamaba?
-Simón el Mau le decían sus cuates. Bien mamón ese su apodo pero aquel era regalón, buena onda era. Solo cuándo se ponía bien verga era un vergueo, pero a mí una vez hasta me regaló un mi saco de hongos, para que la aflojara un tiempo que no encontraba trabajo. El problema que le dicen es que aquel nunca aprendió a chimar bien por andar metido solo en el putero. De patojo no le gustaba casaquear porqué pensaba que las chavas solo por el pisto lo querían, y por eso solo chimando putas se la pasaba. Tanto así era su pedo que a mí me han contado que esta Rossana era puta de profesión y que aquel se la wuevío de un putero, de esos caqueros de la capital. La pisada no sé si te acordás tenía un su acento medio raro, saber si del Salvador o de Costa Rica era.
-Puta madre vos pero que buen culo era aquella, yo solo ganas era. Le miraba las piernas, las nalgas, las tetas y aquella su carita de ángel que tenía. Un hambre que me daba por pisarmela cada vez que salía son aquellas sus licras que se le metían hasta en la concha... ¡Para chuparsela toda! Romperle el pantalón con la verga y hacerlo un que sea en el monte. En serio que la voy a extrañar más a aquella que al cerote del Mau. A mí ese hijo de puta no me caía bien de tan creído que era, solo pajas con uno. A mí me quedo debiendo como 500 bolas de la última vez que nos quedamos jugando naipes. El cerote se malío porque lo baje y esa fue la última vez que nos hablamos, lo tuve que echar de mi tienda, eso hace cómo 5 o 6 años. Hasta cara de macho me hacia cada vez que pasaba por el frente y yo con la pena de irle a cobrar, como era loco el desgraciado.
-Pero bueno regresando al punto que te quería contar, me dijo el Chepe su cuate de toda la vida, que el problema entre aquellos no era por el pisto sino que aquel no se la chimaba bien o que a ella no le gustaba, algo así el pedo. Que una vez hasta hicieron un trío con aquel para ver si así se le bajaba la calentura. Pero que aquella ya no quería que la tocara después de eso, que no le gusto y solo haciendo berrinches se la pasaba. Hasta que encontró a este cuate que a saber de que tamaño tenía la moronga, que le fascinaba pasar chimando con el. Hasta que aquél se dio cuenta. El Chepe me dijo que el Mau le encontró el culo todo moreteado y por eso fue que empezaron los vergueos. Ella le dijo que se cayó de un caballo pero aquel no le creyó y que no sabía que hacer. El Chepe me dijó que aquel si la amaba y estaba dispuesto a todo por quedarse con ella. Pero vos ya te imaginaras cómo es la mente de una puta.
-Puta que grueso no te lo creo.
-Por dios vos, no te digo que eso a mí me lo contó el Chepe ayer en la noche cuando fueron a traer el cuerpo. Me contó que la chava se fue, supuestamente, para su casa hace tres mese y que se llevó a la nena que habían tenido entre los dos, lo más seguro es que andaba con el mejicano cerote. Y le dijo que si se acercaba le iba a quitar hasta las botas.
-No te creo esa mierda vos, muy loco el cuento, si aquí es un pueblito chiquito, esa tu historia ésta pura lica del HBO de una vez.
-Va el pedo final es que aquel agarro tres meses chupando en su casa encerado y al ver que aquella solo lo llamaba para pedirle el pisto decidió matarse. Se puso un santa moronga y se esposo las manos después de ponerse una bolsa en la cabeza. Dejo una carta que apenas se puede leer en donde explica que el no era nada sin la tal Rossana o Raquel, y que era mejor esta muerto que sin su esposa y su hija. Que lo perdonaran pero que el ya no tenía motivos para seguir viviendo, qué se quedaran con su finca y los carros.
-Sigo estúpido de lo que me contás
-En fin lo tienen en el hospital y están esperando a que venga aquella y la hija para enterarlo tal vez mañana miércoles lo vela y lo entierran en la tarde. Maldito loco vos hasta a mí me dejo mula y perturbado. Que forma más basura de ver la vida, no le preocupaba nada, no tenia ambiciones y eso que aquel no era malo... Saber si de tanto comer hongos ya se había vuelto loco y nadie del pueblo nos habíamos dado cuenta, en fin ¿vas a ir al velorio?
-Pero que por supuesto, quiero ir a ver a la Rossana... a ver si ahora de soltera me suelta un chime, ya sin el hueco puto del Mau. Yo digo que le hago los mandados a aquella, me hecho una de mis miradas de corderito en precipicio y ya la tengo en la punta de la verga.
-Solo pajas sos vos cerote...